miércoles, 27 de noviembre de 2013

Proceso enojativo

El enojo a veces es inevitable.
Odio esa sensación.
Estar enojada me pone en un lugar que detesto.
Me da impotencia.
No sé bien cómo manejar el enojo.
Para mi el que se enoja es uno. Con otro. El otro no se enoja. Entonces el que tiene  que dejar de estar enojado es uno.
Si los dos estuviéramos enojados nos peleariamos. Y pelear no es una opción.
Antes de pelearme con alguien prefiero sacarlo de mi vida.
Y no, no me peleo con la gente que quiero.
Pero si me enojo. Poco. Pero a veces lo hago.
Aunque no quiera.
Y ahí estoy yo lidiando con todo ese enojo sin saber que hacer.
Me pone incómoda.
No me gusta.
Pero sé que en algún momento me calmo. Porque yo no soy así. No sirvo enojada. No me sirvo.
Entonces aflojo. Porque siento que vale la pena. O porque entiendo que no tiene sentido. Por lo que sea.
Aflojo.
Entonces ahora sé y el otro sabe qué me enoja. Y puedo lidiar con eso para no volver a enojarme.
Con qué necesidad, no?

No hay comentarios:

Publicar un comentario